El primer paso para convertirte en líder es…
El primer paso para convertirte en líder es…
Mis 2 frases favoritas, y las que mejor definen mi mentalidad, son…
1️⃣ “Lo consiguieron porque no sabían que era imposible” de Jean Cocteau.
2️⃣ “Primero te preguntarán ¿qué estás haciendo? y luego te preguntarán ¿cómo lo has hecho?” – Anónimo
Estas 2 frases describen cómo se han logrado algunas de las más grandes gestas de la humanidad, y deberían invitarnos a reflexionar acerca de cómo la confianza, la perseverancia y las mentalidades abiertas a la exploración se imponen allá donde el miedo y las mentalidades fijas fracasan.
La mentalidad del «Resuelve Problemas»
Desde muy pequeño siempre me ha hecho feliz el ser reconocido por mi familia, amigos y compañeros de clase o de trabajo como esa persona a la que, cuando nadie tiene idea de qué hay que hacer, de cómo resolver un problema, o de cómo superar un reto, podían acudir en busca de soluciones. Desde siempre me ha gustado ser reconocido como un “Resuelve problemas”.
Ya desde muy corta edad, bastaba con que mi padre, un profesor, o un vecino me dijese “Jordi, mira, este problema todavía no lo ha resuelto nadie” para que mi deseo de convertirme en el primero en hacerlo se apoderase de mí y no pudiese dejar de buscar una solución día y noche, hasta lograr resolverlo.
Puedo decir que, el elemento motivador que ha marcado toda mi vida ha sido el poder resolver problemas y superar retos, cuanto más grandes, mejor. Por alguna razón, que hasta hace poco desconocía, mi cerebro siempre se ha sentido atraído por las dificultades. Por esas situaciones que parecen imposibles de superar.
Cuanto mayor es el reto, mayor la motivación
Comenzaron siendo cosas pequeñas, como cuando a los 6 años mi padre vino a verme un día y me planteó el reto de unir 9 puntos con 4 líneas rectas sin levantar el lápiz del papel. Me dejó solo con un lápiz y un papel en mi cuarto, y me pasé semanas intentando resolverlo, sin poder pensar en otra cosa que no fuesen esos 9 puntos y cómo lograr conectar todos ellos con un solo trazo. Soñaba con ellos. No paré hasta encontrar la manera de resolver aquel reto.
Esa pasión por resolver problemas ha marcado toda mi vida, tanto a nivel personal, como profesional. Ya me lo había anticipado mi padre, que era un tipo bastante sabio. “Hijo, con esta obsesión tuya por resolver problemas jamás te va a faltar trabajo, ya que, si algo tienen las empresas, son problemas. Y si algo necesitan es gente con las ganas y la inteligencia que les permita resolverlos. A ti te sobran ambas”.
«Si te conviertes en un resuelve problemas nunca te faltará trabajo, porque si algo tienen la mayoría de empresas son problemas».
Mi padre, con aquella frase, que me repetía cada dos por tres, logro que, a mi deseo por resolver problemas y superar retos se uniese la confianza en mis capacidades. Una confianza que todo buen solucionador de problemas posee. Sin ella resulta imposible afrontar el reto, o si inicialmente lo haces, terminas por desistir a las primeras de cambio.
Por desgracia, cuando no contamos con esa confianza en nosotros mismos y nuestras capacidades nos sentimos abrumados, preocupados o incluso estresados ante el más mínimo problema. La falta de confianza en nosotros mismos puede derivar en serios problemas a lo largo de nuestra vida, de ahí que resulte importante facilitar entornos donde todo el mundo la pueda desarrollar.
La autoconfianza: pilar fundamental del desarrollo humano.
¿Es posible desarrollar todas nuestras capacidades y alcanzar nuestro máximo potencial sin autoconfianza?
Quizás a muchos de vosotros os parezcan preguntas retóricas, sin embargo, en la gran mayoría de empresas del mundo, este tipo de preguntas parecen no tener siempre la misma respuesta.
Para desarrollar la confianza en nosotros mismos es fundamental crecer en un entorno donde las personas se sientan psicológicamente seguras, en un ambiente en el que se les permite cometer errores y aprender de ellos sin ser castigados o criticados continuamente. Por desgracia esos entornos no son los más habituales.
Por el contrario, si nos encontramos en un entorno en el que se castiga o critica cualquier error, nos sentiremos menos seguros de nosotros mismos y, por tanto, nuestra autoconfianza será mucho más baja.
Enfrentar desafíos y superar obstáculos, contando con el apoyo de los que le rodean, es lo que cualquier persona necesita para fortalecer su autoconfianza y creencia en sí misma.
El primer paso para convertirte en líder es…
Antes de completar esta frase, déjame que te plantee una nueva reflexión:
¿Es posible liderar a otros si no confiamos en nosotros mismos y nuestras capacidades para afrontar retos y resolver problemas?
Todos estaremos de acuerdo en que 2 de las principales funciones de un líder son:
1️⃣ Visualizar soluciones a los problemas y retos a los que se enfrenta su equipo.
2️⃣ Transmitir confianza en momentos de dificultad e incertidumbre.
Sin esas 2 capacidades parece difícil que un líder pueda guiar a los suyos ante una situación de adversidad, y mucho menos sea capaz de influenciar positivamente su estado de ánimo y actitud ¿No crees?
En conclusión, un líder que cuenta con la confianza en si mismo para afrontar problemas está en mejor posición para afrontar cualquier desafío, y más dispuesto a compartir su experiencia con el fin de promover un liderazgo orgánico que contribuya al desarrollo de nuevos líderes dentro del equipo. Si no cuentas con confianza en ti mismo y tus capacidades, nadie te verá como alguien en quien poder confiar.
¿Te embarcarías en una misión de alto riesgo liderada por alguien que no confía en sus propias capacidades?
Conclusiones
Para resumir, podemos afirmar que:
1️⃣ Afrontar retos y adversidades, con la tranquilidad de que los que nos rodean no nos castigarán ni criticarán si fallamos, es fundamental a la hora de construir una sólida autoconfianza.
2️⃣ La autoconfianza es el pilar fundamental para el desarrollo de nuestro autoliderazgo. No podemos liderar a otros si no contamos con una sólida confianza en nosotros mismos y nuestras propias capacidades.
3️⃣ El liderazgo solo se desarrolla y florece en entornos psicológicamente seguros.
El liderazgo solo florece en entornos psicológicamente seguros.
Las reflexiones que todos nos deberíamos plantear llegados a este punto, y ante la crisis de liderazgo que viven la gran mayoría de empresas del planeta desde hace algunas décadas son:
1️⃣ ¿Contamos con los entornos de seguridad psicológica donde los profesionales puedan desarrollar su autoconfianza?
2️⃣ ¿Estamos educando a los futuros líderes para que disfruten afrontando retos y resolviendo problemas?
3️⃣ ¿Si la respuesta a las 2 preguntas anteriores es NO, de donde van a salir los líderes que tienen que afrontar los retos de este nuevo siglo?
¿Hora de reflexionar?
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Jordi Alemany
